NIVEL INICIAL

En el primer septenio, desde el nacimiento hasta los siete años de vida, el niño aprende el mundo a través de la experiencia sensorial, de manera muy natural está unido con su entorno. Por ello, las actividades que se le proponen siguen una organización rítmica, procurando propiciar el desarrollo de la voluntad, aprendiendo a través de la imitación, de sus vivencias  y creando las bases para el futuro despliegue de la actividad intelectual. En esta etapa la enseñanza prioriza actividades artísticas, manuales y prácticas y despliega el pensamiento a partir de cuadros imaginativos.  Se replica el ambiente de hogar, en salas multi-edad los niños mayores ayudan a los más pequeños y el juego es fundamental para su desarrollo social.

PRIMER SEPTENIO, el mundo es bueno

El Jardín Micael cuenta con dos salas con una capacidad de veinte niños y niñas cada una. Allí desarrollan sus actividades niños de entre 3 y 6 años momento en el cual, el equipo de maestras realiza observaciones de madurez escolar para que el niño o niña que pase a primer grado se encuentre con la madurez suficiente como para esta nueva etapa.

Los cuentos de hadas, los juegos con materiales nobles, las actividades artísticas, el cortado de verduras y frutas, las manualidades y el juego al aire libre, son cuidados en cada detalle para que cada niño y niña se encuentre en un entorno acogedor, para que perciba que el mundo que los rodea es bueno.

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Las Salas

La escuela cuenta con dos salas de jardín con capacidad para 20 niños y de entre 3 y 6 años cada una. Tal como ocurre en el hogar, los niños de diferentes edades realizan tareas acordes a sus capacidades aprendiendo a compartir y a respetar los tiempos de cada uno.

Los ritmos

Respetando cada estación del año, y manteniendo los ritmos de actividades semanales y diarias, los niños y niñas adquieren seguridad en sí mismos.

Las celebraciones

Festividades cristianas y otras que tienen orígenes ancestrales como la fiesta de los farolitos (o San Juan, correspondiente al solsticio de invierno o el Wiñoy Xipantv del pueblo mapuce), tanto como la fiesta de Micael, o la Pascua, son celebradas en la escuela. Cada una de estas festividades representa una respiración cósmica en la cual nuestras almas se disponen, en diferentes épocas, ante los acontecimientos de manera única, aprendiendo a venerar a través de la naturaleza y todo el universo, aquello que nos trasciende.

Espacio al aire libre

Un espacio muy importante en esta etapa es el juego libre, donde niños y niñas, según su edad, organizan el juego, desrrollan la imaginación, aprende a respetar las reglas que ellos mismos inventan y desarrollan su motricidad. Haga calor, frío, lluvia o viento, el juego al aire libre y en libertad (siempre bajo la mirada de las maestras) es fundamental en esta etapa del desarrollo de niños y niñas.